Herencia del sexo

Problemas sobre Herencia ligada al sexo


El estudio de la herencia de los genes localizados en los cromosomas sexuales fue iniciado por T. H. Morgan y sus estudiantes en los inicios del siglo XX. Aunque Morgan estudiaba la mosca de la fruta, los mismos principios geneticos se aplica a los humanos. Ya que hombres y mujeres difieren en sus cromosomas sexuales, los patrones de herencia para el cromosoma X varían entre los sexos. Nuestro objetivo es entender los principios que gobiernan la herencia genética de los cromosomas sexuales.
 
Sexo y herencia


Aunque se presentan ciertas dificultades debido al pequeño número de descendientes que se originan en cada pareja, es posible comprobar que la herencia de los caracteres humanos sigue las mismas reglas que en otras especies. Aunque algunos caracteres, como la inteligencia, la estatura, el peso..., tienen una herencia algo más complicada, pues no solo dependen de los genes, sino también del ambiente familiar, de la nutrición, de la educación, de la sociedad, etc.


En cuanto al sexo, se puede comprobar que existe la misma probabilidad de tener un descendiente de sexo femenino que de sexo masculino. Este reparto 50 %-50 % indica que la herencia del sexo no es muy compleja.

Herencia del carácter sexo


La posible descendencia de una pareja en cuanto al sexo de los hijos, será como sigue:

Para estudiar la herencia del sexo se considera solamente la herencia de los cromosomas sexuales (X e Y), ya que el resto de los cromosomas (autosomas) no influyen en este carácter.

En la especie humana, un individuo se origina mediante la fecundación de un gameto femenino (óvulo) por un gameto masculino (espermatozoide). Cada uno de estos gametos lleva la mitad de cromosomas (23) que las células somáticas, ya que se han originado en los aparatos reproductores mediante una división por meiosis. Este mecanismo logra que, a partir de las células madre de los gametos, que tienen 46 cromosomas, se obtengan células sexuales, cada una de ellas con 23 cromosomas.

Los gametos de la madre llevarán cada uno un cromosoma X y 22 autosomas. Y los del padre, además de los 22 autosomas, llevan un cromosoma X o uno Y. La fecundación del óvulo la realiza un espermatozoide al azar: si este porta el cromosoma X, se originará un descendiente XX, es decir, una niña; si porta un cromosoma Y, se originará un descendiente XY, es decir, un niño.

Los hombres producen gametos 22 + X y 22 + Y en una proporción uno a uno, es decir, que tienen la misma probabilidad de formarse. En cada fecundación, la probabilidad de que nazca niño o niña será la misma, un 50 %.